Cuando estás en
desacuerdo con alguien, tienes una diferencia de opinión porque tú y la otra
persona tienen diferentes intereses, valores, necesidades e intenciones. Estar
en desacuerdo con alguien no es una cosa mala. Puede ser visto tanto como algo
positivo y funcional así como natural. El desacuerdo no tiene por qué conducir
a una gran pelea. El conflicto, por otro lado, es una poderosa colisión o
disputa de necesidades, valores, intereses e intenciones entre dos individuos o
comunidades, grupos, naciones y organizaciones.
Estar en desacuerdo y en
conflicto
Cuando
estás en desacuerdo con alguien, puedes terminar con una nota positiva. El
desacuerdo te obliga a cambiar, innovar y encontrar mejores formas de hacer las
cosas, así como a desarrollar nuevas habilidades y utilizar los recursos
mejorados. El conflicto con demasiada frecuencia no da lugar a un resultado
positivo. Cuanto más grande es el conflicto, más difícil es controlarlo; en
cambio, un desacuerdo se puede controlar, explica Doug Hovatter de la
Universidad de West Virginia.
Cómo estar en desacuerdo
Cuando
estás en medio de un desacuerdo, debes continuar comunicándote, pero hay que
hacerlo de la forma correcta. Sé consciente de tu voz, de su volumen, tono, de
la velocidad a la que estás hablando y lo fuerte que estás hablando, y controla
tus gestos no verbales. Evita el contacto con la cara de alguien --en su
espacio personal-- porque esto es invasivo y se puede interpretar como una
amenaza. Este comportamiento va a cambiar rápidamente un desacuerdo a un
conflicto.